,El matrimonio es uno de los momentos más importantes en la vida, por eso cada país guarda sus propias tradiciones, algunas de ellas bastante curiosas, en torno a la celebración de la boda. El carácter de los habitantes del pueblo, sus ideales, su religión y la forma de entender el matrimonio hacen completamente diferentes unas celebraciones a otras. Hoy, desde Despedias BIG, os traemos algunas de las costumbres nupciales más peculiares, en las que la originalidad y la excentricidad son las protagonistas.
Empezamos por los españoles, donde existe una fiel creencia de que si llueve el día de la boda, un mal augurio estará presente durante todo el matrimonio. Al contrario de lo que ocurre en Filipinas, donde la lluvia es un buen presagio. Para evitar esta predicción, los españoles regalan huevos a las monjas de las Clarisas, para que recen por el buen tiempo.
En Grecia, sin embargo, son un poco estrambóticos y preparan unos banquetes un tanto inusuales. Con la intención de atraer la buena suerte, una vez que la pareja se une debe romper algunos platos como símbolo de bienestar para lo que se avecina. Además, la esposa debe guardar un pequeño paquete de azúcar para que su vida matrimonial sea más dulce.
En el caso de los escoceses, su forma de honrar a la pareja es de todo menos agradable. Días previos a la boda se celebra la fiesta “Blackening of the Bride”, en la que los amigos del novio secuestran al novio y lo rocían con todos tipo de sustancias repugnantes como huevos podridos, caldo de pescado y todo tipo de salsas desagradables. Una vez que se encuentra totalmente cubierto de suciedad se lleva al futuro novio por las calles de la ciudad y los bares para anunciar la boda.
En Malasia, por ejemplo, tienen una extraña manera de evitar la mala suerte. Según la tradición, las parejas tienen prohibido ir al baño los tres días anteriores a la boda. Para ello, reciben cantidades de comida y bebida mínimas y, son vigilados por sus familiares para evitar que la pareja rompa esa regla.
Más costumbres nupciales
Si nos vamos hasta América, más concretamente hasta Estados Unidos tienen una tradición conocida como “Jumping the Broom”. Esta costumbre consiste en que tras la boda, los novios, agarrados de la mano, deben saltar sobre una escoba. Esto simboliza el compromiso y la unión eterna de la pareja.
Y si viajamos hasta África, más concretamente hasta Mauritania, la tradición habla de la práctica del “Leblouh” o alimentación forzosa. Según esta creencia, las novias son sometidas a un fuerte régimen alimenticio para subir de peso. De esta manera se verán más atractivas, lograrán atraer más pretendientes y alcanzarán un buen matrimonio.
En el caso de los franceses, la costumbre acostumbra a enterrar al novio, metafóricamente hablando. Días antes de la boda se celebra “l’enterrrement de vie de jeune fille/garçon”, en el que se meten dentro de un ataúd varias botellas de alcohol y algún otro recuerdo, para eliminar los malos pasos por los que anduvo el novio anteriormente. Tras el nacimiento del primer bebé o un año después de la boda, estos serán desterrados para traer la buena suerte.
Y por último, nos vamos hasta Egipto, donde la tradición es que las amigas de la novia pellizquen a la futura esposa. ¿Y para qué? Pues como representación de que los golpes que le dará su esposo nunca le dolerán y la buena suerte de las amigas se le transmitirá a ella.
¿Ya has decidido cuál de estas costumbres nupciales es la que más te gusta? O mejor dicho, ¿cuál es la que menos loca te parece?